Brian Snitker es manager de los Bravos. Su hijo Troy se desempeña como coach de bateo en Houston.
“Sabemos que los Snitker vamos a tener un trofeo de la Serie Mundial en casa”, dijo el piloto de los Bravos. “No sé quién va a obtenerlo, pero vamos a tener uno, y eso es muy agradable”.
Un duelo que tardó seis décadas en gestarse confrontará a dos equipos que llegaron a militar en la Liga Nacional y que se han topado más de 700 veces, incluidas cinco series de playoffs.
Tan sólo hay que recordar a Hank Aaron y Jimmy Wynn librando un Derby de Jonrones en el Astrodome. O a Greg Maddux, Tom Glavine y John Smoltz enfrentando a Jeff Bagwell y Craig Biggio en una noche de junio.
Por la calendarización y el COVID-19, los Astros y los Bravos no se enfrentan desde 2017. Chocarán el martes, en el primer juego del Clásico de Otoño, en Houston. Los Astros abren como favoritos por 3-2, de acuerdo con el sitio FanDuel.
Y hay que ser claros: Hay muchos fanáticos que preferirían no ver a ninguno de estos dos equipos a estas alturas de octubre.
El venezolano Altuve, el boricua Correa, Alex Bregman y el cubano Yuli Gurriel cargarán por siempre con la etiqueta de tramposos, tras formar parte de los Astros que idearon un sistema para robar señales, en camino a la conquista de la Serie Mundial de 2019. En el Minute Maid Park encuentran ovaciones. En todos los demás parques los recibe la hostilidad reservada a los peores villanos de las mayores. “Desde que surgieron las malas noticias, hemos tenido que lidiar con lo ocurrido en 2017, y creo que todos queremos demostrar la clase de jugadores que somos”, dijo Yordan Álvarez, Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana.
Fuente: AP