El número de acciones legales contra los propietarios de la discoteca Jet Set ha subido a 41, a raíz del trágico colapso del establecimiento que resultó en 235 muertes y más de 180 heridos, mientras el merenguero Rubby Pérez amenizaba la fiesta semanal de los lunes. Pérez, como uno de los artistas más queridos de la música dominicana, se cuenta entre las víctimas fatales de esta tragedia que ha dejado una huella profunda en millas de vidas.
El dolor de las familias afectadas se refleja en las emprendidas legales, donde se destacan 17 querellas con constitución en actor civil, un claro testimonio de la necesidad de justicia y reparación.
Uno de los casos más recientes es el de Massiel Javier Almonte, esposa del expelotero de Grandes Ligas Octavio Dotel, quien se ha unido al clamor de las víctimas, exigiendo respuestas por la tragedia que ha marcado su vida. Además, se han presentado denuncias por robo a las víctimas, un reflejo de cómo el sufrimiento de las personas se ve multiplicado por actos de abuso y deshonestidad en un momento de vulnerabilidad.
Las querellas, presentaciones ante el Departamento de Atención al Ciudadano de la Fiscalía del Distrito Nacional, evidencian un esfuerzo conjunto entre los afectados y las autoridades para esclarecer lo ocurrido. Las familias de los fallecidos y heridos han demandado a Antonio Espaillat López, su madre Ana Grecia López, y la empresa Inversiones E y L, buscando indemnizaciones millonarias, y solicitando medidas de prisión preventiva para los responsables. Este reclamo no solo se centra en lo económico, sino también en la necesidad de garantizar que tal tragedia no vuelva a ocurrir, y que aquellos responsables enfrenten las consecuencias legales de su negligencia.
En un gesto que refleja la magnitud del desastre, algunas de las querellas también han incluido al Estado dominicano y al Ayuntamiento del Distrito Nacional, por su presunto incumplimiento de las normativas de seguridad y supervisión que deberían haber sido aplicadas en el establecimiento.
Además de las demandas locales, Brian Saldaña, director de producción de Color Visión, quien perdió a su esposa en el colapso, ha anunciado una demanda colectiva en Estados Unidos. A través de su bufete de abogados, Silva & Silva Attorneys and Counselors at Law, busca justicia para las víctimas en el ámbito internacional, subrayando la globalidad de este doloroso evento.
Por último, aunque la hija de Rubby Pérez, Zulinka Pérez, había expresado su intención de presentar una demanda separada por negligencia contra los propietarios de Jet Set, aún no ha formalizado su denuncia ante la Fiscalía. No obstante, su posición refleja el incansable deseo de las familias de no quedarse en el olvido y exigir la responsabilidad que corresponde.
