Después de que se diera a conocer que el Rey Carlos II había prohíbido la presencia de Meghan Markle en Balmoral; todo parece indicar que a la duquesa de Sussex no le importan las reglas impuestas por la familia real. Así fue como la esposa del príncipe Harry causó gran revuelo a su llegada el sábado a las puertas del Castillo de Windsor, donde rompió el protocolo del luto real tras la muerte de la Reina Isabel II; un acto que disgustó a la realeza británica pero que fue aplaudido por sus seguidores.
Después de la muerte de la Reina Isabel II, la que ha dado mucho de qué hablar es Meghan Markle, la esposa del príncipe Harry. Pues tras aparecer en el Windsor, fue protagonista de unos de los reencuentros más esperados, en la que se incluyó a William y su esposa Catherine; un momento que la prensa dejó plasmado en varias fotografías, peus es notorio que ya han dejado atrás los malentendidos.
En esta reunión de hermanos con sus respectivas esposas, hubo un momento en que los duques hicieron una caminata entre la multitud, y fue Meghan Markle la que se acercó para contemplar las flores y otros tributos tras la muerte de la reina Isabel II el pasado jueves. Sin embargo, mientras los demás miembros se limitaron a saludar a los ciudadanos a lo lejos, fue la ex exactriz estadounidense quién rompió el protocolo de luto real. En este momento, la esposa del príncipe Harry se detuvo a platicar con los presentes e incluso abrazó a una joven que se encontraba entre dicha multitud, pues tenía algo que darle y decirle.
En estos momentos, los integrantes de la familia real tienen prohibido acercarse a los ciudadanos y no deben dar muestras de afecto en público durante este periodo en el que se encuentran de luto, pero de acuerdo con varios medios, fue un pequeño él que le pidió un abrazo a Meghan Markle, a lo que la duquesa de Sussex accedió a pesar de romper así con el protocolo real tras la muerte de la Reina Isabel II.
Sin embargo, a Meghan Markle no pareció importarle esta acción, por lo que decidió no seguir con el protocolo para acercarse más a la multitud. Por si fuera poco, hay medios que dicen que la muerte de la Reina Isabel II podría significar la reconciliación entre el príncipe Harry y su esposa con la familia real; esto después de que renunciará a su título real de la realeza británica.
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