LOS ÁNGELES, CA. – Lyle y Erik Menéndez, condenados por el brutal asesinato de sus padres en 1989, han recibido su primera oportunidad de libertad condicional en décadas. Un juez de Los Ángeles modificó el martes sus sentencias de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional a 50 años a cadena perpetua, haciéndolos elegibles inmediatamente para la libertad condicional.
El caso, que conmocionó a la nación y se convirtió en un fenómeno mediático a raíz de la cobertura televisiva de su primer juicio, gira en torno a los asesinatos de José y Kitty Menéndez en su hogar de Beverly Hills. Los hermanos, entonces de 21 y 18 años respectivamente, alegaron haber actuado en defensa propia tras años de abuso paterno.
Oprah se burló de los hermanos Menéndez, y una jurado la corrigió de la manera más elegante
La reciente decisión judicial se produjo tras una audiencia donde familiares y conocidos testificaron sobre la rehabilitación de los hermanos en prisión. La fiscalía se opuso a la modificación de la sentencia, argumentando falta de asunción de responsabilidad por parte de los Menéndez.
Los hermanos comparecieron virtualmente, y Erik Menéndez se dirigió a su familia. El juez Michael Jesic emitió su fallo inmediatamente después.
Bajo la ley de delincuentes juveniles de California, los hermanos son elegibles para libertad condicional debido a su edad al momento del crimen. Ya tienen una audiencia programada para el 13 de junio en relación con una petición de clemencia al gobernador Gavin Newsom, aunque no está claro si esta servirá como su audiencia formal de libertad condicional. El gobernador ha solicitado una evaluación de riesgos antes de cualquier posible liberación.
Si la libertad condicional es negada, podrán tener audiencias futuras. Si se concede, el gobernador aún podría anular la decisión.
Además, los hermanos presentaron una petición de habeas corpus en mayo de 2023, solicitando un nuevo juicio basado en nuevas pruebas de abuso sexual, cuya situación legal aún no se ha definido.