Los implicados no solo ensayaron y simularon el sorteo, tal como señala el ministerio público, sino que también en la acusación de la Operación 13 por criminalidad organizada revelan que su intento por engañar “la suerte” de los jugadores y a todo un sistema quedó grabado en audio.
En las conversaciones transcritas afloran frases como: “lo importante es hacer la primera vez”, “lo que no se practica puede fracasar” y “la primera vez es la más difícil”, expresiones con las que Berigüete Pérez, Felipe Santiago Toribio (El Chago), identificado por el ministerio público como un reconocido apostador en juegos de azar; y Leónidas Medina Arvelo (Nazaret y/o Naza), descrito como el “eje operativo de la operación para la materialización de los hechos”, inducían a los demás a las reuniones para practicar.
El momento justo
Aunque las reuniones no tienen mayor longevidad de un año, el “sorteo especial” estuvo bajo planificación por más que ese periodo.
“Yo tengo mucho tiempo… tratando este proyecto, tengo más de cinco años”, externó Medina Arvelo en conversación con Valentina Rosario, la presentadora que colaboró en el sorteo del uno de mayo.
El también conocido como Nazaret y/o Naza, que permanece prófugo de la justicia, indicó que el momento elegido para el fraude era durante el cambio de gobierno pero que William Rosario, expresidente de Fenabanca y señalado como “mejor amigo” del también acusado Luis Maisichell Dicent, ex administrador de la Lotería Nacional, dijo “vamos a pararlo hasta que llegue la nueva administración”, alegando que él y su amigo formarían parte del gobierno.
“Somos nosotros que vamos para allá”, dijo Santiago Toribio sobre la posición que tenía Rosario.
“Ahí se nos va a hacer más fácil”, enfatizaba el eje operativo.
“La práctica hace al maestro”
Por otro lado, el verbo “practicar” y sus conjugaciones aparecen casi permanentes en las discusiones para llevar a cabo “el plan”.
El Naza insistía en que “la práctica hace al maestro”, por lo que debían entrenar y hasta con cámaras para identificar si se percibía el “bolo ganador”, que se convertiría posteriormente en el “bolo estafador”.
“Lo vamos a hacer con la cámara grabándote (refiriéndose a la locutora) para ver después el video, a ver si se te vio la bola, si se vio algo raro”, externó en una ocasión.
William “el jefe”
En los audios obtenidos por el ministerio público y que reposan en el documento acusatorio abarcando más de 20 páginas, también se revela el supuesto poder del expresidente de Fenabanca, entidad que los propietarios de bancas supuestamente contactaban si algún número presentaba mucha demanda en sus sucursales.
Para Leónidas Medina Arvelo a William Rosario lo llamaban para tratar asuntos como: “Oye Williams y este número que esta como muy alto ¿qué está pasando?” o “Williams mira, yo llevo ya tanto en número vendido de este”.
Precisamente, para evitar que los banqueros identificaran “la movida” con el bolo 13, que para entonces sólo conocían El Naza, una persona no identificada dentro del contexto y Rosario, este último ordenó que las apuestas debían realizarse “una hora antes o media hora antes”.
“Eso me gusta mucho, yo tenía una preocupación de que todo el mundo juega esa vaina, y ahí es que los banqueros se pueden encojonar, entonces ahí es que se va a regar como que c… algo pasó en la lotería, vamos a ver el video”, argumentó Valentina Rosario.
Asimismo, para el día del “sorteo especial” una persona, “obviamente del equipo”, señalan que se encargaría de hacer las jugadas en el extranjero.
“De aquí va una persona solamente con eso… ese va a ser su trabajo, va a romper allá”, apuntaban los imputados.
Actualmente, el grupo de 10 de los 11 imputados cuyo monto defraudado asciende a más de 500 millones de pesos, están cumpliendo medidas de coerción consistentes en prisión preventiva para tres, cuatro con arresto domiciliario, uno con fianza y presentación periódica y otros dos también con presentación e impedimento de salida.